A continuación, te mostramos un listado de lo más representativo:
1- Libera tu estrés
Realizar un sin fin de actividades diarias frente al computador o celular, nos desgastan y terminan saturándonos. La jardinería, usualmente está llena de actividades sencillas y repetitivas, que ayudan a nuestro cerebro a descansar del estrés generado por estas actividades.
2- Contribuye a tu salud emocional
Se ha demostrado científicamente que una bacteria normalmente encontrada en la tierra llamada "Mycobacterium vaccae" ayuda a nivelar la serotonina en el cerebro. Por lo cual no es raro que pacientes con depresión o bipolaridad, sientan una mejoría en su estado de ánimo tras practicar la jardinería regularmente.
3- Te ayuda a ejercitarte
Salir a cuidar de tu jardín es un ejercicio (usualmente de bajo impacto) que te ayudará a estar en mejor forma sin darte cuenta, ya que mientras cuidas a tus plantas, seguramente realizarás: sentadillas, estiramientos y coordinación motriz.
4- Te ofrece alimento
Tener tu propio huerto en casa, te da la posibilidad de experimentar el crecimiento de las especies de vegetales o frutas en un rincón de tu hogar. Toma en cuenta que entre más fresco sea lo que consumas, más lleno estará de nutrientes, por lo cual, esta es un práctica que te ayudará a mejorar la alimentación de toda tu familia. Recuerda que los jardines de consumo, necesitan abonos naturales, así que asesórate con un especialista en el tema antes de usar abonos comerciales para consumo humano.
5- Ayuda a tu cerebro
Estudios han relacionado que realizar jardinería regularmente, ayuda a mantener nuestro cerebro activo y en forma, reduciendo las posibilidades de demencia y Alzheimer en la población de adultos mayores de manera considerable, por lo cual se recomienda esta actividad como terapia alternativa para evitar la degeneración cerebral.
Empieza tu proyecto de jardinería y comienza a ver efectos positivos poco a poco, al final, tu cuerpo y nuestro ecosistema te lo agradecerán.